En Cabello y Salguero se da una particularidad: esta arteria se interrumpe y hace un pequeño zig-zag por Cabello, hacia la derecha, siguiendo después hasta la Costanera Norte, mientras que lo que sería su continuidad en línea recta se convierte en una pequeña calle cortada, sin salida, llamada Monseñor Vicente Faustino Zaspe. También se la conoce como Pasaje “El Lazo”, pues así –hasta 2011- se denominaba previamente al cambio de nomenclatura. En un punto de esta calle un anuncio promociona una interpretación de Shofar, tradicional instrumento musical de viento, utilizado por la colectividad judía en las altas fiestas. También se encuentran en esta zona el Centro para la Juventud Judía “El Lazo”, y una galería comercial con salida a Cabello denominada “Paseo El Lazo”.
Desde allí sigo caminando por Salguero. Hago una cuadra hasta Cerviño, por la cual doblo a la izquierda. Me llama la atención el cartel con el nombre de la calle, ya que dice “Avenida Cerviño”, cuando claramente no se trata de una avenida (de modo oficial sí está así categorizada). A las dos cuadras, en la esquina de Ugarteche, se transforma en un boulevard de doble mano con un cantero central que lleva el nombre de “Plazoleta Dr. Roberto Noble”. En dicho espacio se ve una pequeña estatua de un niño denominada “Querubín”´.
Quiero destacar un hecho: el día en el que realicé este recorrido, el 30 de septiembre, coincidió con el aniversario del atentado de 1974, en el que fallecieron el Gral. Prats y su esposa, ambos de nacionalidad chilena. El ataque se produjo sobre la calle República Árabe Siria, que en aquella época se llamaba Malabia. A manera de homenaje se estaba efectuando un acto, con la interpretación de los himnos de Argentina y Chile y la lectura de varios discursos recordando el trágico suceso, y la personalidad de las víctimas.
Sigo por Cerviño hasta República de la India y llego al final de la calle, limite con las instalaciones del Ecoparque. Se puede divisar allí una escultura sin placa identificatoria. A pocos metros está el templo Yeshurun de la Comunidad Judía Sefaradí. Desde este lugar retomo mi camino por Cerviño. En la esquina de Ugarteche, nuevamente, hay un cartel indicando la presencia, bajo tierra, del arroyo del mismo nombre. En la cuadra siguiente, hasta Scalabrini Ortiz, se levanta un complejo edilicio con cuatro imponentes torres de aproximadamente 30 pisos de altura cada una, mientras que dos cuadras más adelante, en Cerviño y Silvio Ruggieri, se encuentra el patio recreativo que tiene el nombre Plaza de Tbilisi. Sobre una pared, hay dos murales: uno de niños hamacándose y otro, de la Embajada de Georgia, con la inscripción “Mural Amistad”. Desde este sitio se divisa la estructura del Hospital Fernández.
Continuará…
Andrés Rosen