Desde la esquina de Silvio Ruggieri y Cerviño, comienzo a caminar por esta última para acercarme a la entrada principal del Hospital Fernández, fundado en 1889 y reinaugurado en 1943. En cuyo acceso se instaló un banco rojo con la inscripción “No naturalizar la violencia contra las mujeres”. Además hay un busto del Dr. Juan A. Fernández.
De inmediato llego a Cerviño y la Avenida Cnel. Diaz, por la cual doblo a la derecha encontrándome en una zona con gran cantidad de edificios en torre, mientras que en su intersección con Avenida Las Heras se ubica la Academia Nacional de Medicina, creada en 1822 e instalada en su predio actual en 1942. Frente a ella, donde comienza como derivación de Las Heras la calle Pacheco de Melo, está la pequeña Plazoleta Castex. Es desde este lugar donde cruzo Cnel. Díaz para empezar a recorrer el Parque Las Heras. Funcionó allí, hasta 1962, la Penintenciaría Nacional, de cuyos muros conservo un antiguo recuerdo en mi memoria. En el lugar, precisamente en el lugar, hay un pequeño promontorio que formó parte de sus cimientos, con una placa que dice que fue hallado durante los trabajos de remodelación del parque en 1982. En otro sector del Parque está la Escuela de Fútbol y Deportes “Claudio Marangoni”, que fuera instalada en 1987. En otro de sus extremos, sobre Jerónimo Salguero, se encuentra la Escuela “Adolfo Van Gelderen”.
Vuelvo a cruzar el parque, hasta la esquina de Cnel. Díaz y Juncal, encontrándose allí la Parroquia “Nuestra Señora de Loreto”. En la vereda de enfrente está la Clínica del Sol, y pocos metros más adelante, en Juncal y Billinghurst, se halla la Clínica Bazterrica. Posteriormente llego a Cnel. Díaz y Beruti, esquina donde se encuentra una de las entradas del Alto Palermo Shopping, inaugurado en 1990. Media cuadra a la derecha, por Beruti, hay varias instituciones pertenecientes a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires: el Ministerio Público Fiscal, el Fuero Contravencional y la Sede Comunal 14. En tanto, en Cnel. Díaz entre Beruti y Arenales, hay una dársena de salida de combis, que salen con destino a localidades de la Provincia de Buenos Aires, el caso de Bragado, Lobos, Cañuelas y Alberti
Desde allí sigo caminando hasta Cnel. Díaz y Santa Fe, emblemática esquina del barrio de Palermo. A continuación, dos cuadras más adelante, llego a la intersección con Charcas, calle que a partir de esta esquina se convierte en un boulevard. La acera de izquierda está categorizada en forma oficial como una calle: lleva el nombre de República Dominicana y es peatonal. Posee un cantero central con la nomenclatura Plaza Evaristo Carriego. Me llamó la atención que este espacio verde estuviera totalmente enrejado.
Comienzo a caminar por Charcas. Al llegar a la esquina de Guise, el cantero central pasa a llamarse Boulevard Charcas y también está rodeado por rejas. Pero pasando Bulnes el cantero vuelve a cambiar de nombre: ahora es Plazoleta San Vladimiro. Allí se ven dos placas, una, un homenaje de la Iglesia Ortodoxa Rusa; otra de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, recordando los mil años de la implantación del cristianismo en Rusia.
Continuará…
Andrés Rosen