En este soleado día me encuentro tranquila, feliz y contenta porque en mi hogar se quedó una amiga y juntas fuimos a caminar por las calles del barrio. Ojalá que este sentimiento de unidad y alegría perdure en mi alma para siempre.
Reloj, acelera tu paso para que la espera se acorte y así llegar antes a la vera del camino, donde él ansiosamente desea verte. Te cantará una canción de amor mientras se escucha el trinar de los pájaros y juntos verán las rosas florecer y sentirán el aroma de los jazmines y las violetas.
Llévame a volar, paloma. Estás en mi mente y quisiera ir contigo hacia el cielo infinito y ver a las estrellas bailar. Juntas recorreremos la Luna, Marte y Venus y nos acercaremos al sol para que nos entregue su calor y nos llene de vida.
Puerto de Santa Cruz, pedacito de mi alma, reza una canción del gran Horacio Guarany, a quién tuve el placer de ver en el Festival de Cosquín. Aún recuerdo la euforia que su actuación producía en el público en aquellas noches del verano cordobés, junto a otros magníficos representantes del folklore como Los Cantores del Alba y el maestro Eduardo Falú.
Tuve ocasión de tener vacaciones en el albergue universitario Inacayal, cuando ya no era tan dependiente de mi mamá. Qué lugar paradisíaco, lleno de árboles, cascadas, flores hermosas y pájaros de todos los colores, con su maravilloso canto que me despertaba al amanecer. Con mis compañeros de aventura practicábamos deportes, juegos de mesa… Y por las noches bailábamos y cantábamos hasta caer rendidos en nuestras habitaciones.
Varios años después pude volver al sur argentino con mi familia y juntos subimos hasta el refugio del Cerro López en Bariloche. Fue una difícil caminata, pero pude realizarla y resultó una de las mejores experiencias de mi vida.
Te vi nuevamente, buscabas cobijo y casi pude acariciarte con mi mano. Tu tibio plumaje gris, tus patitas blancas, tu pecho claro, tu corto pico eran un regalo para mi vista y mi alma, porque yo te amo, paloma triste que viajas por el cielo y regresas a tu hogar.
Raquel Seltzer