Yo Digo

ÉRAMOS Y SOMOS AMIGAS

Written by

Beatriz, nos encontrábamos en el río, éramos y somos amigas… ¡cuán rápido pasa el tiempo! Ambas estábamos embarazadas e íbamos a la confitería Richmond a tomar el té. Qué inteligente eres. Tenemos fe en Dios, al que ambas invocamos pidiéndole por la paz, por la salud de nuestros seres queridos, y para que el amor venza al odio.

Fui a verte cuando estabas por dar a luz, de tu vientre nació Alejandra, tu primogénita. Una hermosa nena rubia que fue muy amiga de mi hijo Eduardo, y que ambas soñábamos con que algún día formaran pareja y constituyeran un nuevo hogar. No recuerdo bien como eran tus hermanos, pero creo que conocí a Sarita, tan parecida a ti, con esa hermosa tonada cordobesa que siempre suena en mis oídos cuando las recuerdo, charlando animadamente.

Hoy, por suerte, pude escuchar un movimiento de la pieza musical “La consagración de la primavera”. Su autor, Stravinsky, nos hace vibrar las cuerdas del corazón; particularmente, los compositores rusos tienen magia para crear e interpretar música clásica. Al igual que los alemanes, de los que especialmente amo a Fritz Kreisler, quien me deleitó con sus obras para violín llamadas “Alegrías y Penas de Amor”, y al extraordinario Franz Schubert, quien compuso sus maravillosos lieders, pequeñas obras maestras que le cantaban a la vida exaltando mis sentimientos.

Aprendí a conocer a estos autores guiada por mi padre, un melómano apasionado, que en su tiempo libre disfrutaba escuchando música clásica y me impulsó desde pequeña a compartir con él las sublimes melodías de los grandes compositores.

Amo la filosofía. Cuando puedo ver y escuchar las disertaciones de los filósofos contemporáneos, les presto mucha atención; e inmediatamente recuerdo a los grandes de la historia, como Sócrates, Platón, Santo Tomás de Aquino y Tomás Moro. O los más recientes Kant y Sartre. Aprendí a conocerlos, leyendo desde niña enciclopedias como “El Tesoro de la Juventud” y los tomos inolvidables de “Lo Sé Todo”, que aún conservo en mis retinas.

Sé que los ángeles del más allá me cuidan. Tengo esperanza en mi vida, la sueño larga y buena, con mucho afecto y rodeada para siempre de todos mis seres queridos, disfrutando de los que me acompañan y recordando a los que ya no están.

About the author

Leave a Comment